Decorar con colores vivos, una tendencia que no pasa de moda.

Llámalo como quieras: hippie chic, happy chic, bohemian chic, contemporáneo colorido, ecléctico o, simplemente, pasión por el color en todas sus acepciones.

Si te gusta el color a la hora de decorar, te va a interesar esta nota. Porque no nos negarás que decorar con mucho color da siempre un resultado mucho más alegre que hacerlo con tonos pálidos y aburridos.

Es cierto que nos reconocemos como grandes amantes del blanco puro y casi sin concesiones, pero hay lugar para todos los colores en casa. Un hogar absolutamente blanco acaba siendo monótono y te obliga a no poder jugar demasiado con otras tonalidades por miedo a romper la estructura que ya hay creada....

Por eso nos gusta el blanco, pero también nos apasiona romperlo con colores vivos, a veces con diseños muy folk, como los del estilo más hippie y bohemio. Otras veces, con estilo moderno simplemente con color.

Como para gustos se inventaron los colores, si sos de los que no se atreve demasiado a ponerlos en práctica con las paredes por miedo a no saber hacer las combinaciones adecuadas de tonalidades, recurrí al blanco, que siempre da buen resultado, pero rompelo con algunos elementos de color como pueden ser:

• cortinas

• almohadones para los sofás y sillones

• tapicerías de sillas

• alfombras y kilims

• lámparas

• cuadros

Esto te permite siempre cambiar la decoración si te cansás de los colores. Sin embargo, si te atrevés a pintar las paredes de colores atrevidos, brillantes, fuertes, elegí cuidadosamente el tono, tanto del mobiliario como de los objetos decorativos y otros accesorios.

Algunas sugerencias de colores de pared y muebles:

• Los fondos grises (pared) con el mobiliario amarillo dan un resultado impactante aunque el gris en general sirve como base para colores.

• Fondos azules o verdosos y mobiliario blanco o color madera.

• El fondo en verde agua, verde pastel o verde oliva con los tonos rosados y durazno.

• Los fondos en esmeralda envejecido con las maderas oscuras

Es una gran variante, laquear tus muebles en diferentes tonos y colores con el fin de que puedas jugar más con el contraste de color de tus paredes o de los textiles de tu hogar (almohadones, cortinas, alfombras, mantas, pillows …)

Es cierto que la moda ahora son los tonos pastel, y de hecho nos encantan, pero también pensamos que una casa es grande y dentro de ella hay opciones para todo.

Con este post de hoy te animamos a que pierdas el miedo al color y te animes a convertir tu hogar en un lugar distinto y rompedor de patrones que repiten una y otra vez en muchas casas, que sea un reflejo de tu personalidad. ¿Te atrevés?

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